martes, 22 de enero de 2008

Un niño muy educado y su pelota de beisbol.

Unos niños juegan a béisbol, cuando la bola se vuela por una ventana de un apartamento en un segundo piso. Todos están de acuerdo que Miguelito vaya por la pelota ya que él tiene un modo de hablar muy elocuente. Sube Miguelito y cuando la dueña de la casa abre a puerta, Miguelito dice:
- Disculpe, apreciable dama, estábamos jugando un emocionante partido, cuando en el momento de mayor exaltación deportiva, la esférica describió una extraña parábola en el aire y adentróse en su linda morada. Pídole por favor que me la devuelva.
La señora se queda pasmada ante ese vocabulario y llama al marido.
- Qué pasa, María?
- Ven a ver este niño, qué bonito que habla...
Llega el marido y la mujer dice al niño que repita lo dicho...
- Decíale a su gentil esposa que jugábamos un emocionante partido cuando en el momento de mayor exaltación deportiva...
- ¡Espera niño! - dice el padre, Anita, Juanito, vengan acá para que escuchen y aprendan cómo se debe hablar.
Llegan los niños y el padre le dice a Miguelito que repita lo dicho.
- Explicaba a sus progenitores que jugábamos un emocionante partido cuando en el momento de mayor exaltación deportiva, la esférica describió...
- ¡Abuela, abuelo! - interrumpió uno de los hijos, vengan acá y escuchen cómo habla este niño...
Llega la abuela y el abuelo del fondo del apartamento.
- Qué pasa?
- Niño, por favor, cuéntale a los abuelos para que oigan...
- Decía yo que... que pueden quedarse con la pelota y que se pueden ir todos a la mierda.

No hay comentarios:

Publicar un comentario