jueves, 10 de abril de 2008

Descubren la primera rana “sin aliento”.

Copiado y pegado del Blog de Maikelnai.




Os presento a Barbourula kalimantanensis, también conocida como Rana de Borneo de cabeza plana. Hay algo peculiar en ella ¿verdad? Pues si, se trata de una rana muy especial y es que es el primer batracio conocido en el mundo que es inmune al cáncer de pulmón.

Lógico, esta rana no tiene pinta de fumar… diréis. Cierto, la rana no fuma ni una triste colilla, pero si os digo que esta bonita criatura también es inmune a la tuberculosis, enfisema, bronquitis y demás neumopatías seguro que empezáis a sospechar algo ¿a que si?

Efectivamente, como muchos habréis adivinado el truco de la rana es que carece de pulmones. Los científicos dicen que esta audacia evolutiva es realmente rara (afirman que solo ha ocurrido 3 veces en la historia), y aunque ya se había observado en otras especies de anfibios, como las salamandras, es la primera vez que lo advierten en ranas.

Lo cierto es que la rana se las apaña muy bien sin pulmones ya que respira por la piel, algo que todas las ranas hacen como complemento a la respiración pulmonar, y en el fondo esta peculiaridad le va de cine. Y cuando digo “en el fondo” lo digo literalmente, porque a las ranas lo de sumergirse con los pulmones medio llenos (o medio vacíos) les causa problemas de flotabilidad (seguro que a ti te ha pasado cuando en la playa se te llenan de aire las bermudas) por lo que, libre de “flotadores”, este batracio indonesio es todo un maestro buceando hasta las profundidades.

La Barbourula kalimantanensis no es una recién descubierta, se la conoce desde la década de 1970, pero hasta ahora no se había conocido esta rara característica (la primera rana “sin aliento”) y es que nunca antes se le había realizado una necropsia… para todo hay una maldita primera vez.

Los científicos creen que el medioambiente en el que habita, caracterizado por temperaturas bajas y altos niveles de oxígeno, le echó un cable a la hora de evolucionar hacia la respiración cutánea única. Podremos leer más sobre sus descubrimientos en una próxima edición de
Current Biology. (Foto: David Bickford, Current Biology)

No hay comentarios:

Publicar un comentario